Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea reunidos en Luxemburgo han anunciado un aumento de la presencia militar en Sudán, de manera que los efectivos europeos destacados en el territorio alcancen la cifra de 5.000. También han expresado su preocupación por la continuada violación de derechos humanos en Irán y la necesidad de fomentar el diálogo con las autoridades, y han adoptado la imposición de sanciones a la Junta militar birmana.