Economía

Las elecciones en Alemania dejan en suspense la reforma de la Eurozona

por Nacho Alarcón

Christian Lindner, líder de FDP
Christian Lindner, líder de FDP
Fuente: Matthias Hornung

Como todas las encuestas preveían, Angela Merkel, canciller alemana, se hizo con la victoria en los comicios de este domingo, pero lo hizo con menos votos de los esperados. La continua caída de los resultados electorales de los socialistas obligarán a la canciller a buscar una alianza con FDP y Los Verdes, lo que puede frenar la reforma de la Eurozona impulsada tras la victoria de Emmanuel Macron en Francia.

Hace solo dos semanas, Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea, celebraba en su Discurso del Estado de la Unión (SOTEU) el final de la época de los populismos en la Unión Europea. El golpe de realidad ha llegado de donde menos se esperaba en los últimos tiempos: Alemania.

Anoche se confirmaba la noticia que todos sabían, que AfD entraría en el Bundestag. La novedad es que se confirmaron encuestas con peores augurios y el partido de extrema derecha obtuvo el tercer puesto en las elecciones, con un 12,6% de los votos, lo que se traduce en 94 asientos en el Parlamento.

Tras los primeros sondeos a pie de urna, Martin Schulz, líder de SPD, compareció ante los militantes de su partido y anunció que daba por muerta la “Gran Coalición”, la colaboración entre la CDU de Merkel y su partido. Las alternativas no eran mejores para el ex presidente de la Eurocámara: formar Gobierno con la canciller daría un Ejecutivo rápido y estable a Alemania, pero dejaría a como líder de la oposición a AfD. Franco Delle Donne, doctor en comunicación política por la Freie Universität Berlin y autor del libro “Factor AfD”, explica a Aquí Europa que una de las razones que llevan a algunos votantes a elegir al partido de extrema derecha es, precisamente, no encontrar diferencias entre SPD y CDU, por lo que duda de la conveniencia de la que sería la tercera “Gran coalición” en solo cuatro legislaturas.

Merkel obtuvo el 33,2% de los votos, por debajo de lo que reflejaban las encuestas, que le daban entre un 34 y un 38%. Así, la CDU/CSU ha obtenido 246 escaños, 65 asientos menos que en las elecciones de 2013. Por su parte el SPD ha obtenido 153 escaños, perdiendo un total de 40 respecto a las elecciones anteriores.

Nueva coalición

La canciller se verá obligada a buscar socios en el FDP y en Los Verdes, la llamada ‘coalición Jamaica’ (por los colores de los partidos políticos). Será difícil porque hay profundas diferencias entre ambos partidos, aunque Los Verdes han acercado sus posturas a las de la CDU, ya que su electorado ha envejecido y se ha enriquecido durante los últimos años.

Los liberales de FDP son los socios naturales de la CDU, y de hecho, Merkel ya gobernó con ellos durante su segundo mandato. Bajo el mando de Christian Lindner los liberales han cambiado el enfoque de sus mensajes políticos: hasta ahora era conocido como el partido de las grandes empresas, y durante esta campaña electoral han hecho hincapié en ser el partido de los emprendedores.

¿Quién saldría perdiendo de esta posible coalición? Dos personas: el actual ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, ya que el FDP había anunciado con antelación que pedirá esa cartera; y Emmanuel Macron, presidente de Francia, que verá cómo se frena su agenda de reforma de la Eurozona, ya que muchas de las medidas que propone son rechazadas frontalmente por Lindner. Macron presentará mañana en la Sorbona sus planes para el futuro de la UE y lo hará sabiendo que la coalición "Jamaica" en Berlín restara sus posibilidades.

Durante el debate de ayer el líder liberal ya explicó una de sus líneas rojas, que choca con una de las propuestas de Macron: “Un presupuesto de la Eurozona de 60.000 millones de euros entrando a Francia o Italia es inconcebible para nosotros”. Lindner también ha asegurado en numerosas ocasiones que Grecia debería salir de la zona euro.

Otra de las propuestas para profundizar en la integración de la Eurozona consiste en la creación de Fondo Monetario Europeo (FME) para lo que se podría utilizar como semilla al Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE). Pero FDP propone un camino inverso: desmantelar el MEDE.