Tras una semana de disputa entre Astrazeneca, la UE y el Reino Unido sobre las vacunas producidas por la compañía farmacéutica sueco-británica la Agencia Europea del Medicamento ha dado, finalmente, su visto bueno al fármaco, aprobando su uso dentro de las fronteras europeas. Además, este beneplácito ha llegado sin límites de edad, a pesar de las dudas expuestas por el Ministerio de Sanidad alemán, que afirmó no tener la intención de usar esta vacuna con los mayores de 65 años debido a la falta de estudios para esta franja de población.