El Consejo Europeo de invierno celebrado esta semana en Bruselas ha dado el visto bueno a la propuesta del Consejo de Ministros informal de Educación que tuvo lugar el mes pasado en Gotemburgo, sobre la creación de una red europea de universidades que centre sus estudios en contenidos europeos. Educar a universitarios en identidad de la Unión Europea se convierte, por tanto, en un nuevo objetivo básico del proyecto de construcción europea. La voluntad de los líderes políticos de los Estados miembros, basada en una propuesta lanzada por el presidente francés Emmanuele Macron, es convertir a la Universidad en el eje formador del pensamiento europeo. Estamos ante la versión plus del programa Erasmus, que en 2017 ha cumplido 30 años y que ha demostrado ser uno de los grandes aciertos de las políticas europeas para crear conciencia de unión.