Ante el alarmante empobrecimiento de los bosques en Europa, la Comisión Europea junto con el Comité Económico para Europa de la Naciones Unidas (ONU/CEE) han presentado el primer Informe Ejecutivo de 1997 sobre la Condición Forestal en Europa. Este estudio revela que el 42% de las parcelas analizadas registran suelos forestales en condiciones precarias. Además de los agentes dañinos de la propia naturaleza, la contaminación humana y los sedimentos ácidos depositados han elevado el aluminio en la composición de los suelos, provocando concentraciones de este metal que resultan tóxicas para las raíces de los árboles. Aunque ya se han producido ligeras mejoras en varias de las zonas más afectadas, un 31,7% de las zonas estudiadas muestran deterioros progresivos. España destaca junto con Italia y Francia por el empeoramiento de la condición de sus bosques.