En su primer informe de actividad desde la adopción de la estrategia europea sobre ciencias vivas y biotecnología, la Comisión Europea advierte de que el riesgo de divergencias entre las políticas de los Estados miembros podría comprometer seriamente la eficacia y coherencia de la estrategia europea en este ámbito. Aunque se han logrado algunos progresos como la adopción del VI Programa Marco de Investigación o el marco reglamentario de la UE para los organismos genéticamente modificados (OGM), otras áreas sufren retrasos importantes, según el informe. Por ello, la Comisión ha pedido a los Estados miembros resolución y compromisos concretos de manera que puedan alcanzarse los objetivos fijados por el Consejo Europeo de Lisboa (marzo 2000) en el ámbito de las ciencias vivas y de la biotecnología.