Bulgaria, Hungría, Lituania y Rumania cuentan con el apoyo del Parlamento Europeo para participar en los programas de salud y política social que tiene en marcha la UE, y Estonia tiene el mismo permiso para ciertas acciones comunitarias de promoción. Los eurodiputados han aprobado el 14 de julio cinco propuestas de la Comisión que permitirán a estos países del este integrarse en programas hasta ahora sólo disponibles para los Estados miembros.