El pleno del Parlamento Europeo aprobó ayer la propuesta de directiva que establece la responsabilidad medioambiental de los causantes de un daño ecológico. La votación de la Eurocámara desestimó numerosas enmiendas presentadas en primera y segunda lectura cuyo objetivo era reforzar el texto legislativo. La organización ecologista Greenpeace y el grupo parlamentario de Los Verdes han lamentado que la normativa no haya salido reforzada del Parlamento y aseguran que el Pleno ha cedido a las presiones del Consejo.