Las perspectivas a medio plazo para los mercados comunitarios del cereal, la carne y los lácteos parecen relativamente favorables. Sin embargo, a pesar de los logros positivos alcanzados durante los preparativos hacia la adhesión, los nuevos Estados miembros de la UE deberán seguir reestructurando sus industrias agrícolas y alimentarias si quieren incrementar su competitividad en el mercado único. Así lo pone de manifiesto el informe "Perspectivas a medio plazo para los mercados agrícolas y los ingresos en la Unión Europea: 2003-2010", publicado hoy por la Comisión Europea. El documento adelanta también que, durante ese período, se irá explotando gradualmente el pleno potencial del mercado único, mientras que el sector agrícola de los nuevos Estados miembros aumentará en un 35% sus ingresos con respecto a 2002.