La liberalización del transporte ferroviario internacional de mercancías se producirá el 1 de enero de 2006, mientras que la del transporte nacional llegará un año después. Esta apertura de mercados será posible tras el visto bueno dado por el pleno del Parlamento Europeo al acuerdo alcanzado en el comité de conciliación y que ha sido apoyado por 387 votos a favor, 78 en contra y 6 abstenciones. La tramitación de la liberalización del transporte de viajeros tendrá lugar en la próxima legislatura. Con este paquete se pretende revitalizar un modo de transporte menos contaminante que la carretera y que ha sufrido pérdidas de cuota de mercado importantes.