En 2003, 192,8 millones de ciudadanos de la Unión Europea mayores de quince años tenían un trabajo, lo que supuso una tasa total de empleo del 63% para las personas de entre 15 y 64 años. Sin embargo, las disparidades entre los Veinticinco son enormes, especialmente en cuanto a empleo femenino, cuya tasa varía desde el 71,5% de Suecia al 33,6% de Malta. Estos son los datos que revela un nuevo informe de la oficina estadística de la UE, Eurostat, publicado hoy bajo el título "Encuesta sobre las fuerzas de trabajo-2003".