La estrategia de cooperación entre la Unión Europea y los países africanos y de Oriente Medio bañados por el Mediterráneo, adoptada por el Consejo Europeo en Bruselas en junio de 2004, debe ser de orden económico, político, de seguridad y también educativo y cultural, con el objetivo último de promover la realización de reformas en estos países, así como de contribuir a su desarrollo socioeconómico. En este sentido, el Consejo de ministros de Asuntos Generales y Relaciones Exteriores, ha dado la bienvenida a los planes de acción propuestos por la Comisión en relación algunos de los países de esta región, como Israel, Jordania, Marruecos y la Autoridad Palestina, en el marco de la Política Europea de Vecindad (PEV).