La batalla por los fondos se presenta para España más difícil de lo previsto, a tenor del anuncio realizado ayer por el presidente de turno de la UE, Jean Claude Juncker, ya que lejos de mejorar su salida del Fondo de Cohesión mantiene en dos años la prórroga con una partida de 2.000 millones de euros para 2007 y 2008. La última propuesta, que negociarán mañana los líderes europeos en la Cumbre que comienza esta tarde, mantiene el recorte previsto para la política de cohesión, que se lleva el 0,37% del presupuesto total.