El Ejecutivo comunitario ha propuesto hoy una nueva directiva sobre "movilidad de pensiones" que permitirá a los trabajadores europeos cambiar de empleo o trasladarse a otro país sin preocuparse de perder una parte sustancial de sus derechos a cobrar una pensión de jubilación en el futuro, como ocurre hoy en día en algunos Estados miembros. Su objetivo es eliminar los obstáculos que impiden a los trabajadores europeos tener una mayor flexibilidad y facilitarles el acceso a empleos que se adapten a su cualificación laboral dentro del territorio comunitario. Actualmente, en los 15 países más antiguos de la UE, un trabajador de cada tres cambia de empleo cada cinco años y un 9% cambia de empresa anualmente.