Neelie Kroes se sumó ayer a las críticas versadas en el seno del pleno del Parlamento Europeo, que se reúne esta semana en Estrasburgo, acerca de las acciones llevadas a cabo por algunos Ejecutivos de la UE para frenar adquisiciones de empresas nacionales por parte de compañías de fuera del país, europeas o no. La responsable en materia de Competencia de la Comisión Europea se refirió en concreto a "cualquier interferencia de los Gobiernos que no esté justificada por los tratados" como a un factor "negativo para Europa, que no le permite beneficiarse de la integración de los mercados".