La Comisión Europea movilizará en las próximas semanas y meses, a través de la Agencia Europea de control de fronteras exteriores (Frontex), un dispositivo de aviones y lanchas rápidas de ocho Estados miembros para apoyar la vigilancia de la costa canaria. Se trata de la medida más visible, gracias a la contribución de los socios de la UE que en esta materia tienen competencias, en respuesta a la petición de ayuda del Gobierno español por la avalancha de inmigración irregular llegada a las islas. La vicepresidenta española, María Teresa Fernández de la Vega, definió el paquete de "quince medidas" puesto a disposición de las autoridades españolas como "un plan de choque". Muchas de ellas, sin embargo, ya estaban previstas, aunque se acelerarán y experimentarán en Canarias.