El trabajo del vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de la política de inmigración, Franco Frattini, para facilitar la entrada sólo de los inmigrantes altamente cualificados y establecer un marco con los derechos socioeconómicos de los inmigrantes trabajadores de terceros países ya está muy avanzado. Frattini dio buena cuenta de los elementos de los que constará esta "tarjeta azul" ayer, durante una conferencia de alto nivel sobre inmigración celebrada en Lisboa, bajo los auspicios de la Presidencia portuguesa de la UE. Según avanzó, los receptores de la tarjeta recibirán un permiso de trabajo y residencia inicial de dos años para un único Estado miembro pero podrán renovarlo y moverse a otro país de la UE a partir de los dos o tres años.