América Latina

Vicepresidenta Saint Malo: ‘La UE y Panamá compartimos valores'

por Jesús González Mateos, director de Aquí Europa

Vicepresidenta del Gobierno de Panamá
Vicepresidenta del Gobierno de Panamá

Isabel de Saint Malo (1968) dio sus primeros pasos en política acompañando a Juan Carlos Varela en su camino hacia la presidencia de Panamá. Tras ganar los comicios se hizo con la vicepresidencia del Gobierno de Panamá el año 2014 y también con el ministerio de Asuntos Exteriores. Desde entonces una de sus prioridades ha sido proyectar el papel del país en el mundo y en la región. La semana pasada visitó Bruselas en el marco de las Jornadas Europeas del Desarrollo que se centraron este año en el papel de la mujer.

Aquí Europa.- Antes que nada preguntarle por la situación de las relaciones con la Unión Europea en el campo de la cooperación, también en lo que se refiere al papel de la mujer en la sociedad y la economía.

Isabel Saint Malo.- La participación en las jornadas (de desarrollo europeas) ha sido propicia y sobre todo el marco de trabajo la UE y Panamá, que es que compartimos valores. Cuando miramos nuestra defensa de la democracia, derechos humanos y respeto al marco internacional y los compromisos internacionales, creo que eso facilita nuestra cooperación. Aunque que cada uno busque su defensa de intereses como país, al final perseguimos lo mismos objetivos: el bienestar a nuestros pueblos y poblaciones, oportunidades de negocio… Y este es el marco de trabajo común. En esta visita y con ese marco hemos hablado de cooperación. Panamá es un país de renta media-alta, vamos probablemente a ser el país de mayor crecimiento de la región y del producto interior bruto (PIB) más alto de la zona. Eso conlleva una gran responsabilidad y lo entendemos. En esa dirección y hace dos años en el marco del Gobierno del presidente Juan Carlos Varela hemos lanzado un plan estratégico de cooperación de Panamá que mapea las áreas en las que buscamos buenas prácticas de otros países pero también busca las áreas en las que Panamá puede ser cooperante. Y nos interesa mucho poder contribuir, no solo con el esfuerzo de Panamá hacia los objetivos de desarrollo sostenible, sino de la región de América Latina y el Caribe, que es muy vulnerable.

El tema de género es uno de los dos objetivos clave. Sabemos que contribuye al alcance del resto de los objetivos, porque si se sigue excluyendo a la mitad de la población de participación, toma de decisiones y actividad económica estamos dejando de generar millones y millones de euros. La economía está dejando de lado la generación de riqueza y de empleos. Cada vez se avanza más, pero queda mucho. Por eso agradezco mucho la invitación a las jornadas del desarrollo.

AE.- Me gustaría que hiciera una evaluación del grado de funcionamiento que Panamá estima del acuerdo de asociación de la UE con Centroamérica, porque no tenemos muy claro el nivel de impacto que está teniendo.

ISM.- Yo diría que aún poco, aunque es cierto que la implementación del acuerdo de una manera más vigorosa está sujeta a las ratificaciones de los parlamento nacionales. Dicho eso sí creo que es un logro haberlo firmado porque es un marco de trabajo que si bien no está al 100% implementado es una referencia oportuna e importante que ayuda a que sigamos trabajando.

AE.- Sobre la gira del presidente, que ha estado en el Reino Unido que ahora mira al Brexit. Panamá evidentemente quiere seguir manteniendo unas relaciones con Londres de normalidad. ¿Cómo ha visto la situación allí y cuál es el estatus que persigue Panamá?

ISM.- La relación entre el Reino Unido y Panamá es histórica y estrecha. Hay un dato que sorprende y es que el británico es el tercer Estado con mayor inversión extranjera directa en nuestro país. Son cifras muy grandes. Observar mucho interés del empresariado británico porque los inversores que están en Panamá han podido ver con sus propios ojos un país diferente, con un marco jurídico estable que promueve la inversión y la libre empresa, y estoy segura de que vamos a ver más de este tipo de trabajo conjunto. Evidentemente el Brexit hace que aquellos países que tenemos una relación estrecha con el Reino Unido tengamos que afrontar cambios, porque gran parte de las relaciones que manteníamos eran a través de la Unión Europea y eso ahora tendrá que cambiar. Este fue el objetivo principal de la visita del presidente Varela al Reino Unido: replantear la relación bilateral con Panamá.

También tenemos mucho interés en el tema de seguridad, un asunto muy importante para nosotros. Hemos logrado aplacar el problema del narcotráfico que es una realidad que no podemos negar porque incide en los temas de seguridad, y a pesar de ello hemos conseguido bajar de forma considerable la criminalidad en Panamá. Estamos ya en 9 homicidios por cada 100.000 habitantes, que es una cifra baja si la  comparamos con la región, y vamos a seguir trabajando en ello. Entendemos que hay que cooperar en seguridad como una lucha global en que la colaboración es trascendental. El crimen organizado en un país con una geografía como la que tenemos nosotros, que es un centro logístico, con nuestro canal y nuestros aeropuertos que nos hacen un país de tránsito, hacen todavía más estratégica la colaboración con otros países, algo que también hacemos con la UE. Yo diría que el tema de inversión y seguridad fueron las dos prioridades de la visita presidencial, aunque en términos generales el Reino Unido está colaborando mucho con Panamá en temas de información y de idioma inglés, ya que tenemos un plan muy amplio que ha sido prioridad de este Gobierno para la enseñanza del inglés a profesores y estudiantes, capacitando ya a 6.000 maestros en una iniciativa muy importante que intenta llevar a todos los colegios panameños la educación bilingüe desde preescolar, y eso es un gran logro. También estamos trabajando en aspectos técnicos.

AE.- Un tema que preocupa muchísimo ahora mismo en la UE es la guerra comercial con Estados Unidos iniciada por el presidente Donald Trump, tanto con Europa como con China. Esto evidentemente pone a Panamá como el eje. Cuál es el planteamiento panameño ante esta situación.

ISM.- Panamá definitivamente defiende el libre comercio. Nosotros hemos sido un país globalizado desde siempre y mantenemos tratados de libre comercio con múltiples países. Debo decir que en esta realidad actual no sentimos que nos vaya a afectar directamente. Si miramos los acuerdos comerciales que tenemos con otros países normalmente son deficitarios para Panamá porque realmente nosotros no somos un país exportador, por lo que estamos trabajando en ello. De hecho hemos lanzado una marca que hemos llamado “Panamá exporta”, a partir de la cual sí estamos trabajando mucho para promover productos agrícolas.

AE.- En todo caso Panamá está iniciando las negociaciones de un acuerdo comercial con China, que sí que se puede ver afectada por la guerra comercial, ¿no?

ISM.- Hemos comenzado las negociaciones justo esta semana. Está el ministro de Comercio en China, y esperamos avanzar de una manera bastante acelerada en la negociación de este tratado de libre comercio. Nos estamos poniendo un plazo de no más de un año en coherencia con todos los acuerdos que hemos cerrado con China. Hemos firmado ya 23 acuerdos en el ámbito de 12 puntos prioritarios y esperemos que la negociación de ese acuerdo comercial continúe con ese espíritu.

AE.- Volviendo a las relaciones regionales: la cumbre UE-CELAC de El Salvador se canceló, la reunión de cancilleres se ha ido retrasando, parece que podría celebrarse en julio, ¿qué cree que necesita la relación?

ISM.- Creo que es muy importante la relación CELAC-Unión Europea, aunque no haya sido positivo que la reunión se haya ido retrasando tanto y que habláramos de una reunión de jefes de Estado y ahora sea de cancilleres, pero sería muy oportuno que se hiciera aunque sea tarde y a ese nivel. Lo que sucede es que estamos hablando de una relación de un bloque con una política común, con una visión compartida y una institucionalidad robusta como la UE versus un bloque que no es un bloque, que es un grupo de países, una región sin una institucionalización compartida, lo más que tiene es la Organización de Estados Americanos que no logra ponerse de acuerdo en un sinnúmero de temas, pero no es una relación de igual a igual y homogénea. Dicho eso es relevante la relación entre regiones. Ciertamente América Latina y el Caribe tiene cosas que contar que deben ser los elementos que podamos llevar a una reunión con la UE, pero también tenemos diferencias que se profundizan dados los acontecimientos recientes en algunos de los países, y eso ha incidido en que la reunión se atrase y el nivel se cambie.

AE.- Le quería preguntar también por la situación humanitaria en Venezuela y por el papel central que Panamá juega.

ISM.- Nos preocupa mucho la situación tanto de Venezuela como de Nicaragua. Y para separar los temas: el conflicto en Venezuela es de carácter político que se ha traducido ya en una crisis humanitaria de grandes consecuencias que está teniendo impacto en la región y está generando un éxodo masivo de venezolanos hacia el resto de los países, y que está generando situaciones en el ámbito de salud que preocupan. Se ha informado del brote de enfermedades en el país que estaban realmente desaparecidas de la región. Qué significa esto para la zona ciertamente es todavía un interrogante. A todo esto hay que añadir que el Gobierno venezolano no reconoce que hay una crisis humanitaria, por lo que se hace difícil el planteamiento del resto de los países para resolver una crisis que no se reconoce que existe. Así es que nosotros seguimos dispuestos a contribuir para resolver la situación y ayudar a que Venezuela logre una solución, ojalá que con unas nuevas elecciones realmente democráticas que permitan la efectiva participación de todos los sectores y que puedan generar un cambio en la situación.

Nicaragua preocupa también. Hay muchos muertos en muy poco tiempo, eso es siempre inaceptable. La violencia debe ser el último recurso sobre todo cuando se dan situaciones con civiles, y eso es algo que definitivamente rechazamos y hemos estado instando al Gobierno nicaragüense a buscar una salida de esta crisis. Hay un esfuerzo de diálogo, que algunos días tienen más éxito que otros.

AE.- Respecto a Venezuela parece que en Europa se ha logrado un consenso de que primero hay que acudir a la crisis humanitaria y luego a la política, pero la primera empieza a ser ya de un gran calado. Entiendo que Panamá también está en esa posición.

ISM.- Así es. En el ámbito de la crisis humanitaria el grupo de Lima está convocando a una reunión en los próximos días con los organismos de Naciones Unidas para ver cómo podemos actuar, en primer lugar con las poblaciones venezolanas fuera de su país, buscar protocolos homogéneos porque no tenemos en nuestros países ningún tipo de acuerdo sobre cómo contribuir, y cada Estado a respondido y actuado en la medida de sus posibilidades. Seguimos abrigando la esperanza de poder contribuir con la crisis alimentaria.

AE.- ¿Qué impacto de imagen que han tenido los llamados ‘Panamá Papers’ en la Unión Europea? Y por otro lado, si le preguntaran a la vicepresidenta la imagen que querría que Europa tuviera de Panamá, ¿cuál sería?

ISM.- Creo que podemos decir hoy que esa explosión mediática que golpeó muy duro a mi país es cosa del pasado. Ciertamente los cambios reales son más rápidos de lo que cambia la percepción, así que si bien la realidad que se describió en esas publicaciones no era cierta, los pasos que dio Panamá para demostrarlo fueron contundentes y creo que ha sido reconocido así por nuestros socios y los organismos que tutelan estos temas. La imagen del ciudadano común creo que está cambiando y que es algo que viene después de la valoración técnica que ha cambiado al 100%. Pero tenemos que seguir trabajando en que esa descripción técnica, que dice que somos un país absolutamente comprometido con los más altos estándares en materia de transparencia fiscal, se traduzca en el conocimiento del ciudadano que no maneja los aspectos técnicos y se queda con la parte mediática que fue dura e injusta.

Yo querría que el ciudadano europeo se quedara con lo que Panamá es, y para eso nada mejor que ir a Panamá y visitarlo, que es un país absolutamente comprometido con los valores que Europa atesora: la democracia, derechos humanos, el Estado de derecho. Un país que ha avanzado en el ámbito de sus instituciones y economía, que está trabajando muy duro por el desarrollo humano de su población. Que sigue teniendo retos en el campo de la educación, del bienestar, pero que hemos progresado significativamente y que tenemos una apuesta seria por contribuir al cumplimiento de los objetivos de desarrollo 2030 y que vamos a lograr en algunos objetivos. Somos un país en paz, que lo que busca es contribuir no solo al bienestar de su población, sino a ser un Estado que promueve que otros países logran sus objetivos, refuercen su marco democrático, que sea el diálogo el que siempre prevalezca y el mecanismo por el cual los países busquemos la solución a los conflictos.