“¿Tenemos lo que necesario para implementar un mundo sostenible?”, se preguntaba Michal Kurtyka, presidente de la COP24, este martes en un debate sobre los resultados de esta conferencia mundial. “Unir a los países es complejo”, ha comentado a su vez Arias Cañete, comisario de Acción Climática. Con el futuro de los países para mitigar y adaptar el cambio climático, se espera que la 'Guía de Katowice' sea el primer paso para fomentar una transición justa en donde el ciudadano puedan ser partícipe de los cambios sin sufrirlos.

Empezó siendo el 'camino a Katowice' y ahora se ha convertido en la defensa de una 'guía climática' para que los Gobiernos del mundo fomenten la llamada 'transición justa'. Este martes Bruselas ha acogido un debate de alto nivel sobre el clima, en el que han estado presentes Miguel Ángel Arias Cañete, comisario de Acción Climática, y Michal Kurtyka, presidente de la COP24, la Conferencia sobre el cambio climático y el futuro del planeta que se celebró hace unas semanas en Katowice (Polonia).

Uno de los principales platos de esa cumbre climática fue la 'Guía de Katowice', que sentaba las bases para cumplir con los objetivos firmados en los Acuerdos de París en 2015. “Es nuestro bebé”, ha bromeado esta mañana Kurtyka. Un bebé que llegó con 24 horas de tardanza porque los negociadores de los diferentes países no se ponían de acuerdo en ciertos puntos de la guía. 

“No intentamos escribir un nuevo tratado internacional, sino crear unas reglas comunes que sigan unas pautas para mitigar y adaptar el cambio climático”, ha comentado este martes Arias Cañete. Para el mandatario, el conseguir este resultado fue todo un éxito, puesto que “si ya cuesta aunar a los Veintiocho, no me quiero imaginar hacerlo con el resto del mundo”, le decía el español a Kurtyka.

Kurtyca, que a la vez que presidente de la COP24 es Secretario de Energía y Medio Ambiente de Polonia, se ha preguntado por su parte si “tienen lo necesario” para aplicar una política medioambiental mundial. Para el polaco, “muchos pensaban que ningún acuerdo saldría adelante”, puesto que no “son tiempos fáciles en la situación geopolítica internacional”. Algo que confirmaba cuando se ha sincerado y ha admitido que “la primera semana se estaba muy lejos de lo planificado”, aunque finalmente se pudo concluir el evento con una estrategia para alcanzar los objetivos marcados para el 2030 y con la misión de crear una transición ecológica justa. Aun así, el polaco se ha preguntado si se tiene “lo necesario para implementar un mundo sostenible”.

La transición ecológica y el futuro climático de la UE

Con todo, ambos mandatarios creen que “se debe de aprender de los errores pasados” que han permitido que la política comience a centrarse en la sociedad. “Tenemos que incluir a los ciudadanos en el centro de las políticas y hacerlos partícipes”, ha ahondado Kurtyka. “Necesitamos trabajar en tres pilares: la gobernanza, la tecnología y la aceptación”, ha añadido en su alocución.

La pregunta sobre qué significaba 'aceptación' ha sido otro de los puntos clave de este acto celebrado en Bruselas. Y la gran conclusión ha sido que se puede entender como aquello que permite “hacer que las personas entiendan algunas decisiones dentro de las políticas ambientales”. Algo que hace pensar en los últimos acontecimientos ocurridos en Francia con los 'chalecos amarillos', que salieron a protestar por la subida de los impuestos al diésel, a pesar de ser una medida que en principio se planteaba en favor de la salud ciudadana.

“Uno de nuestros desafíos es el invertir más dinero del Marco Financiero Plurianual (MFP) del 2021-2027 en los fondos de transición”, ha urdido Arias Cañete. Esos fondos son un apartado del MFP que ayuda a los Estados para desarrollar políticas sostenibles. Por otra parte, en una conversación con Aquí Europa, el comisario español ha afirmado que el “plan climático de 2050 de la Unión Europea es lo más ambicioso que se podía hacer” dadas las “diferencias entre los países”. Arias Cañete tiene claro que la “UE no presentará mecanismos flexibles en temas de transición hacia un modelo más sostenible”, a pesar de que “otros países sí los están implementando”.

Arias Cañete tendrá por delante una agenda llena de compromisos, pues hace unos días el Ejecutivo comunitario anunciaba que añadiría temporalmente a sus responsabilidades a cargo de la cartera de Acción Climática las de Maros Sefcovic, comisario de la Unión Energética, puesto que este último se presenta a las elecciones presidenciales de Eslovaquia.

La Comisión Europea también tiene por delante unos meses muy intensos en el aspecto del medio ambiente. Con el cierre de las minas de carbón en países como Alemania o España, la aplicación de la Estrategia de Plásticos, la implantación de los acuerdos sobre emisiones de coches y camiones o el diseño de una economía basada en la circularidad, los Veintiocho tienen mucho trabajo por delante. Por su parte, la COP24 de Katowice y la Agenda del 2050 son ya el punto de partida para que los países negocien una estrategia a largo plazo para la mitigación y adaptación de los procesos climáticos que están ocurriendo en la actualidad y de aquellos que quedan por venir.