Josep Borrell, Alto Representante de Asuntos Exteriores de la UE, ha expresado, junto a los líderes de las distintas instituciones europeas, su férrea condena al golpe de Estado militar producido en Birmania. “Es una clara violación de la constitución del país y un intento de los militares de anular la voluntad de la gente de Birmania y su fuerte deseo de democracia”, ha declarado Borrell, que también ha exigido la liberación de los miembros del gobierno electo apresados y el respeto al proceso democrático.