Maya Ormazabal, directora de Medioambiente y Derechos Humanos de Telefónica, responde a las preguntas formuladas para Canal Europa y el diario de Bruselas Aquí Europa. Durante la entrevista han valorado las medidas de la UE en materia de transición ecológica, cómo emplearla para que sea justa e inclusiva, cómo deben las empresas responsabilizarse de ese impacto, y qué está haciendo Telefónica para lograrlo.

CANAL EUROPA.- ¿Cómo valora las medidas que está tomando la Unión Europea en cuanto a la transición ecológica?

MAYA ORMAZABAL.- Las medidas las valoramos de forma positiva, si bien son realmente ambiciosas. Desde que se lanzó el Green Deal y el paquete de financiación sostenible, la Unión Europea ha intentado modificar todas las políticas que tiene para lograr esta transición del continente.

Sin embargo, las compañías nos estamos viendo embarcadas en un modelo de cambio de negocio y creo que hay paquetes muy importantes e interesantes, más allá del cambio climático, como todo el paquete de economía circular que va a afectar a la medida en la que consumimos estos materiales.

También podemos destacar que estos paquetes del Green Deal son muy importantes, pero la transición verde y digital son las dos transiciones que la Unión Europea está haciendo de forma conjunta y los fondos Next Generation tienen porcentajes dirigidos a ambas.

C.E.- ¿Qué herramientas debemos emplear para conseguir esa transición ecológica que también tiene que ser justa e inclusiva?

M.O.- Tenemos que hacer esta transición pensando en las brechas geográficas, como por ejemplo esta conectividad que Telefónica pone sobre la mesa. Pero obviamente también vamos a encontrarnos con retos en esta transición digital, relacionados con la formación.

La digitalización es sinónimo de creación de empleo de calidad, sostenible e inclusivo y va a permitir aumentar el PIB entre 1,5 y un 2,5 puntos anuales, hasta el año 2025 y por supuesto, incrementar también la productividad de las Pymes entre un 15% y un 25%. Las Pymes son un colectivo muy importante en el tejido empresarial español y tenemos que incorporarlas en esta transición, que es la transición verde y la transición digital.

En la transición verde han ido un poco por detrás. Sin embargo, sabemos que para lograr los objetivos climáticos, todos tenemos que hacer esta transición, incluidas las pymes. En la transición digital pasa exactamente lo mismo.

C.E.- Más allá de lo que son las políticas institucionales, ¿cuál es el rol de las empresas? ¿Cómo deben responsabilizarse en el impacto que tienen sobre el medio ambiente y por tanto en estos objetivos climáticos?

M.O.- Considero que las empresas tienen un rol fundamental más allá de los gobiernos. Tienen el rol de buscar modelos de negocio que permitan a las compañías ser sostenibles en términos económicos, en el corto y en el largo plazo. Para lograrlo, las compañías nos tenemos que preguntar, ¿cuál es el principal impacto que estamos causando en el medio ambiente? ¿Cómo nuestro modelo de negocio puede ser sostenible a futuro?

Realmente la transición ecológica, la transición ambiental, no es una moda, no es algo que haya venido de forma fugaz y se vaya a ir. Se va a quedar y las compañías que no lo vean y que no hagan este cambio en profundidad, probablemente van a tener problemas a futuro para sobrevivir.

El cambio climático lo tenemos ya aquí con consecuencias que empezamos a vislumbrar. De momento, los dos de los principales riesgos económicos a fecha de hoy ya provienen del medio ambiente, pero en 10 años, los cinco principales riesgos para la economía van a venir de elementos ambientales. Por lo tanto, las compañías que estamos expuestas a los riesgos económicos, tenemos claro que tenemos que hacer esta transición.

C.E.- Telefónica es pionera en sostenibilidad y en economía circular, incluso casi antes de que el paquete de economía circular de la Comisión Europea saliera. ¿Qué es lo que está haciendo en estos momentos Telefónica en esta batalla por el cumplimiento de los objetivos climáticos y la sostenibilidad?

M.O.- En Telefónica llevamos ya dos décadas trabajando en materia ambiental, pero sí es cierto que en los últimos tiempos esto se está convirtiendo en una estrategia vinculada a nuestra estrategia de negocio. Nos estamos convirtiendo en una compañía más verde y a través de estos compromisos ambientales estamos consiguiendo reducir nuestra dependencia de combustibles fósiles. Ya el cien por cien de la energía que consumimos es renovable.

Tenemos unos objetivos que nos llevan a que en el año 2040 seamos una compañía con cero emisiones netas, incluyendo nuestra cadena de valor. Pero no sólo estamos viendo objetivos a largo plazo, en el corto plazo, hemos conseguido reducir nuestras emisiones un 70% entre el año 2015 y el año 2021.

Sin embargo, en nuestro sector, aparte de reducir su propia huella de carbono, donde tenemos más oportunidades de aportar en la mitigación del cambio climático es a través de nuestros productos y servicios. Estamos desarrollando servicios como el teletrabajo que reducen el consumo en transporte o el internet de las cosas que nos ayuda a reducir las emisiones de sectores como la distribución, el transporte. En la agricultura también estamos viendo como servicios relacionados con el uso de IOT, plataformas de inteligencia sobre estas capas de conectividad, permiten reducir el uso de agua y también energético y de insumos como pesticidas y fertilizantes.

Tenemos el compromiso de evitar 12 millones de toneladas de CO2 por año, en el año 2025. Ya el año pasado evitamos sólo en un año, 8 millones de toneladas, por lo tanto, sabemos que estamos en el camino adecuado y tenemos que seguir impulsando la digitalización para lograr que esta transformación ecológica tenga lugar, no solamente en Telefónica, sino también en nuestros clientes.