La UE ha llegado hoy a un acuerdo con Rusia para que se reanuden de forma inmediata las exportaciones de hortalizas europeas al país. Ello ha sido posible gracias a las negociaciones de la delegación política comunitaria desplazada a Moscú estos días.
La Cumbre UE-Rusia celebrada hace dos semanas culminó con un acuerdo para terminar con el veto del Kremlin a las productos agrícolas europeos. Sin embargo, Moscú sigue bloqueando la entrada de hortalizas, por lo que el Ejecutivo comunitario va a enviar una delegación encabezada por el comisario John Dalli para poner fin a la situación.
La cumbre UE-Rusia ha arrojado una buena noticia para los agricultores del viejo continente. José Manuel Barroso, presidente de la Comisión Europea, ha anunciado que el bloqueo a los vegetales europeos en Rusia será "levantado" tras un acuerdo alcanzado con el Kremlin. Flanqueado por Dimitri Medvedev, jefe del Estado ruso, ha afirmado que durante el encuentro se ha ofrecido a Moscú participar en las pruebas de estrés nuclear.
Serguei Lavrov, ministro ruso de Asuntos Exteriores, ha abogado hoy en Bruselas por establecer un sistema de alerta rápida trilateral que implique a la UE, Rusia y Ucrania. El objetivo es evitar crisis del suministro energético como la que dejó temblando a millones de europeos en enero. En cualquier caso, el ministro ha querido dejar claro que el problema está en el país de tránsito, Ucrania.
La Unión Europea ha manifestado hoy que podría ofrecer asistencia económica a Bielorrusia a través de líneas de préstamo procedentes del Fondo Monetario Internacional (FMI). Al mismo tiempo, la Presidencia sueca ha criticado la escasa motivación del gobierno bielorruso para imponer reformas y respetar los derechos humanos.
Moscú pidió a la UE, el pasado 5 de abril en Berlín, negociar un nuevo pacto de seguridad colectiva que incluya a ambas potencias y que brinde una seguridad equitativa a todos los países de la zona euroatlántica. Un informe del Real Instituto Elcano ha analizado la situación de las relaciones actuales del país con la UE, donde alaba la postura europea de mantener los acuerdos existentes establecidos.
Jerzy Buzek, presidente del Parlamento Europeo, pidió ayer a las autoridades rusas que investiguen la muerte de Andrei Kulagin, activista ruso por los derechos humanos encontrado muerto el miércoles. Kulagin, que llevaba desaparecido desde mayo, es la segunda muerte de un activista en Rusia en las dos últimas semanas. El pasado miércoles 15, Natalia Estemirova, que investigaba los secuestros en Chechenia, fue asesinada en la República rusa norcaucásica de Ingushetia.
Después de varios meses sin reconocer que la recesión estaba afectando a Rusia, sus dirigentes han admitido su impacto, lo que ha reintroducido en el discurso político términos como "déficit", "recortes presupuestarios" y "desempleo". Esta debilidad económica podría hacer pensar a los países occidentales que Moscú va a ser menos arrogante en su política exterior. Nada más lejos de la realidad, según un informe de CEPS. Este 'think-tank' europeo afirma que la UE y las demás potencias del oeste que no deberían "hacerse ilusiones con una Rusia más sumisa", ya que la crisis no va a variar su actuación a medio plazo.
A finales de mayo en Jabárovsk y en Ginebra, y hoy en San Petersburgo, autoridades políticas rusas y europeas han debatido sobre el estado de las negociaciones para la firma de un acuerdo de cooperación entre la UE y Rusia. Documento que no se alcanzará hasta que la antigua URSS entre en la Organización Mundial del Comercio (OMC). No obstante, Catherine Ashton, comisaria europea de Comercio, ha afirmado que ambas partes están predispuestas a seguir avanzando.
Bielorrusia ya ha puesto en marcha la legislación que reformará el papel de las autoridades locales, pero antes de continuar adelante quiere enseñar el borrador al Consejo Europeo. Así lo ha manifestado esta mañana el embajador del país ante la Unión Europea, Yury Ambrazavich, durante una mesa redonda organizada por el Comité de las Regiones.
Alexander Krestiyanov, director adjunto de la Misión de Rusia ante la Unión Europea, ha afirmado esta mañana en Bruselas, que las relaciones entre ambos territorios "están lejos de ser ideales". Nada que ver este mensaje poco tranquilizador con el apuntado por Adele Airoldi, antigua miembro del departamento de Medio Ambiente del Consejo Europeo, quien ha asegurado que "hoy más que nunca existe una verdadera necesidad de cooperación". Prueba de ello es el 90% de gas que la Unión Europa debe importar de Rusia para abastecer las necesidades energéticas de los cerca de 500 millones de ciudadanos europeos.
La Unión Europea teme que Rusia esté preparando medidas proteccionistas en materia comercial para los próximos años. Estos rumores se los hará saber en la cumbre entre ambas potencias, que tendrá lugar en el este de Rusia el próximo jueves y viernes. Por otra parte, fuentes de la Comisión Europea han asegurado que el encuentro propiciará un buen ritmo de negociaciones para adoptar el sistema de alerta que evite el corte de suministro energético, como el sucedido el pasado mes de enero.
"Europa tiene que hacer frente a delicados retos en su frontera con los antiguos países satélites de la Unión Soviética. Muchos de ellos, aún hoy, responden a los antojos de Rusia". Con este mensaje poco alentador ha abierto Graham Watson, presidente del grupo de la Alianza de los Democrátas y Liberales por Europa, el encuentro con el antiguo primer ministro ruso Mikhail kasyanov. El exdirigente de Moscú ha aprovechado la ocasión para pedirle a Europa que no cierre los ojos ante "la antipolítica" que practica Vladimir Putin, actual primer ministro de Rusia, que llevará al país "a una verdadera hecatombe antes de que acabe el año".
Durante una sesión celebrada ayer, eurodiputados y expertos de la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo debatieron sobre los pasos a seguir respecto a las relaciones entre la UE y Rusia. Las principales discusiones giraron en torno a la fiabilidad de Moscú a la hora de negociar la renovación del acuerdo marco entre ambas potencias.
José Manuel Barroso, presidente de la Comisión Europea, acompañado de cuatro vicepresidentes y cinco comisarios europeos, se ha reunido hoy con Vladimir Putin, primer ministro ruso y Dmitri Medvédev, presidente del país, para reforzar las relaciones bilaterales. Ambas delegaciones han hablado sobre la crisis del gas, el cambio climático y la Cumbre del G-20 que tendrá lugar en abril en Londres. También han abordado el respeto de los derechos humanos por parte de Rusia, con motivo del fallecimiento de varios activistas de los derechos humanos en el país. Barroso ha reconocido la preocupación de la opinión pública europea respecto a esta materia.
"A pesar de que Kosovo permanece de facto bajo la tutela internacional, la Unión Europea lo tendrá difícil para gestionar su independencia", advierte un informe de la Fundación para las Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior (FRIDE) y del Centre for European Policy Studies (CEPS), dos think-tank europeos. Señala que el reconocimiento del nuevo Estado ha abierto "la caja de Pandora de las reivindicaciones separatistas", aunque la comunidad internacional lo haya presentado como un caso especial que no sienta precedentes.
Hoy hace 15 días que Rusia cortó el suministro de gas a la Unión Europea por su conflicto con Ucrania, país por donde pasa el gasoducto. Dimitri Medveded, presidente ruso, telefoneó ayer a José Manuel Barroso, presidente de la Comisión Europea, para anunciarle que está preparando una reunión de alto nivel entre Kiev y Moscú. Sin embargo, Johannes Laitenberger, portavoz del Ejecutivo comunitario, ha subrayado hoy en rueda de prensa que el suministro de gas ya debería estar restablecido, y ha alertado de que la celebración de dicha reunión no debe ser una condición para enviar el gas a Europa.
El Centro Europeo de Estudios Políticos (CEPS, en sus siglas en inglés) ha publicado hoy un informe en el que analiza las relaciones de la Unión Europea con los países vecinos del Norte y su repercusión en Rusia. Además, hace un repaso de los principales puntos que tienen en común ambos territorios y establece un conjunto de recomendaciones para aumentar la cooperación con Moscú. La política energética ocupa una plaza central como elemento a explotar en pro de futuras negociaciones.
Nicolas Sarkozy, presidente de turno de la UE, y Dimitri Medvédev, presidente de Rusia, han anunciado hoy en Niza (Francia) su intención de celebrar una Cumbre a mediados de 2009 destinada a sentar las bases de un nuevo sistema de seguridad en Europa. La estabilidad en la región se ha visto debilitada por conflictos como la guerra ruso-georgiana del pasado agosto o el escudo antimisiles que EEUU quiere desplegar en República Checa y Polonia y que el Kremlin ve como una amenaza directa a su territorio.
Los ministros de Defensa y Asuntos Exteriores de la Unión Europea han dado luz verde a despliegue de una misión militar naval frente a las costas de Somalia, con el objetivo de luchar contra la piratería. Esperan que esté operativa a partir del 8 de diciembre. Por otra parte, el Consejo ha aprobado retomar las negociaciones encaminadas a firmar un acuerdo de Asociación y Cooperación con Rusia, pospuestas en agosto por la guerra de Georgia.
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