Un proyecto europeo pretende descubrir cómo afecta a los conductores el consumo de drogas y fármacos
El proyecto comunitario "Conducir bajo la influencia de drogas, alcohol y medicinas" (DRUID, en sus siglas en inglés) investiga cómo impactan estas sustancias psicoactivas en la seguridad vial. Para ello, los investigadores recogen muestras de sangre y de saliva de los conductores que se ven inmersos en un accidente circulatorio y de los que son sometidos a controles de tráfico aleatorios. En total, se analizan 33 de esas sustancias, tanto legales como prohibidas.