Vox ha aterrizado hoy por primera vez en el Parlamento Europeo y advierte de que esta visita será la primera de muchas. Javier Ortega Smith, secretario general del partido de extrema derecha, ha “atizado” a los “golpistas catalanes” y a la UE. Entre sus referencias de un discurso agresivo no han faltado menciones a Carlos V, la batalla de Lepanto, el burka o la petición de “Puigdemont, a prisión”.

“Que nadie se caiga, que dirán que hemos sido nosotros”. Así entraba Ortega Smith a la sala del Parlamento que acogía ‘Cataluña, una región española', la primera conferencia de Vox en la Eurocámara. Una vez dentro su encendido discurso ha girado entre referencias históricas a las Navas de Tolosa o la batalla de Lepanto y descalificaciones a asociaciones y líderes independentistas.

El acto había comenzado agitado: Antonio Tajani, presidente del Parlamento Europeo, no lo había prohibido a pesar de las peticiones de grupos como ERC o el BNG, que pedían vetar al grupo de extrema derecha. En la sala un grupo de personas ha sacado una pancarta (‘Nuestros derechos no son negociables’), la bandera trans y la bandera LGTBI. Estas personas han permanecido casi cinco minutos, al tiempo que Rafal Kolotowski, eurodiputado polaco de los Conservadores y Reformistas, que ha organizado el evento, introducía a los ponentes.

En su arranque, Ortega Smith se ha dedicado a agarrar el delorean patrio y hacer un recorrido por la historia de España con referencias a las Cortes de León (“la cuna de la democracia en 1188”); a la batalla de Lepanto, a Tolosa o a Carlos V, que han permitido que “todas las señoras de aquí no tengan que vestir el burka”. Las palabras han levantado risas e indignación entre algunas asistentes.

Pero a Bruselas el secretario general fue a hablar de Cataluña. “De nuestra querida Cataluña”. Unas palabras que han sido menos cariñosas en sus referencias a todo aquello que tuviese algún tinte independentista. A Carles Puigdemont, ex presidente catalán huido a Bélgica, le ha deseado la prisión. A los CDR los ha tildado de “organización criminal” y a la Asamblea Nacional Catalana (ACN) de facinerosos. En general ha cargado contra todos aquellos implicados en el referéndum del 1 de octubre, contra los que Vox se ha presentado como acusación particular, que Ortega Smith denomina como la “acusación de España”. “Cataluña es España, España es Cataluña. Sin ley no hay democracia. Bienvenidos a la resistencia desde Europa”, ha apuntado.

Además, ha reafirmado que España se debería haber salido del acuerdo marco de la euroorden después de que un juez alemán rechazase la extradición de Puigdemont a España y lo dejase libre. Ortega Smith opina que existen “tribunales cobardes o que se dejan manipular por los poderes políticos”. Otros países como Bélgica, el Reino Unido o Suiza han dejado también en libertad a los políticos independentistas que permanecen dentro de su territorio.

Escobas y Murcia

Otros miembros de Vox que han acudido a la conferencia han afirmado que los independentistas quieren que forme parte de sus ‘Països Catalanes' “una parte de Murcia” o que en Baleares hay que saber hablar catalán para poder “trabajar barriendo el suelo”. TV3 ha sido otra de las dianas, con un vídeo de varios minutos en el que han intentado desacreditar “con ocho escenas” a la radio y televisión pública catalanas con cortes del programa de humor 'Polònia' o de sus informativos.

 Cuando el acto estaba llegando a su fin, ha ocurrido otro de los momentos previsibles de la jornada. Mark Demesmaeker, eurodiputado del N-VA, partido nacionalista flamenco que acogió con los brazos abiertos a Puigdemont, ha increpado a Ortega Smith por sus intentos de cortar “la diversidad de opinión”.

El eurodiputado también ha criticado el juicio contra los políticos catalanes y ha afirmado que a los líderes catalanes “no se les ha permitido expresarse” en la Eurocámara. Hace unas semanas el Parlamento prohibió una conferencia de Carles Puigdemont y Quim Torra “por motivos de seguridad”. La sala se ha convertido en un festival de gritos contra el eurodiputado, al que han intentado silenciar con golpes en las mesas y abucheos. Ortega Smith le ha contestado que “los separatistas desprecian la diversidad de opinión porque expulsan a todo el que no piensa como él” y ha ironizado remarcando al belga que ”puede irse a recibir el donativo que le va a dar el ‘molt honorable’ fugado, traidor y cobarde de Puigdemont” tras sus palabras.

Kosma Zlotowski, el eurodiputado que ha organizado el evento ha intentado mediar en este fuego cruzado. El polaco pertenece al Partido polaco Libertad y Justicia (PiS), que se encuentra en el grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), misma familia política que el N-VA.

Con esta coalición anti-natura de fondo, Ortega Smith ha aventurado que Vox no revelará a qué partido europeo se adscribirá hasta las elecciones europeas. Los Conservadores serían una de las opciones más lógicas, aunque no extrañaría la unión con otros grupos de extrema derecha como Europa de las Naciones y de las Libertades el que abandera Marine Le Pen.