Unión Europea

INTERACTIVO | ¿De qué está hecha la nube negra de tu ciudad?

por Cristina Pita da Veiga

Fuente: Elaboración propia

La temperatura en Europa ha subido 2ºC desde la segunda mitad del siglo XIX y esta es una de las razones de que se tomen medidas para reducir la emisión de gases contaminantes.¿Sabes qué es el NO2? ¿Y el O3? Bruselas llevará a algunos países de la UE ante la Justicia por no prevenir la emisión de gases contaminantes. Pero ¿se sabe cuáles son los gases que forman parte de la atmósfera? En Aquí Europa te explicamos cuáles son y por qué son perjudiciales para la salud.

En los últimos meses se ha escuchado mucho hablar de los gases que cubren los cielos europeos, sobre todo después de que la Comisión llevara a España y a Bulgaria a la Justicia europea por no cumplir con las normas establecidas con el medio ambiente, sumándose así a una larga lista de países que Bruselas ha llevado a los tribunales por este asunto, como a Italia, Alemania, Francia o el Reino Unido. En el caso de ciudades como Madrid y Barcelona por sobrepasar los niveles recomendados de NO2 (dióxido de nitrógeno). ¿Qué es este componente? ¿Qué consecuencias tiene y de dónde viene?

contaminacio-n-Mesa-de-trabajo-1

Elaboración: Aquí Europa

La famosa seta que se sitúa sobre la ciudad de Madrid, así como el aire contaminado de las ciudades europeas con más polución, tiene una gran variedad de gases. El más conocido es el dióxido de carbono (CO2), aquel que produce el efecto invernadero. No es ninguna novedad porque seguramente este debe ser el compuesto del que más se lee, aunque no tiene consecuencias directas en el ser humano, si las tiene en el medio ambiente.

El gas del que se está escuchando hablar últimamente es el NO2, se trata de uno de los compuestos más dañinos y actúa directamente sobre el ser humano provocando problemas respiratorios. Este surge de la combustión de los vehículos o industrias y es una de las razones de la creación de Madrid Central, un mecanismo que pretende reducir la emisión de este gas de los coches disminuyendo el tráfico.

Pero en el aire también se encuentra el O3, es el ozono y contamina cuando, en vez de encontrarse en la superficie protegiendo al planeta de los rayos solares, está situado en las partes inferiores de la atmósfera, más todavía al ras del suelo y puede dañar la salud. Las altas temperaturas y la contaminación del aire provocan el aumento de la formación del O3, por lo que hay más cantidad en verano. Y así es como nuestro mecanismo de superviviencia básica puede pasar a ser perjudicial.

También se puede encontrar el dióxido de azufre (SO2), que surge de la combustión y de las calefacciones principalmente y provoca irritación y problemas en las cavidades respiratorias. Los volcanes lo producen de forma natural. Hay que tener en cuenta que todos estos compuestos aparecen como algo habitual en el planeta y la gente está acostumbrada a vivir con ellos. El problema viene cuando se producen en gran cantidad y diversos factores se unen provocando su multiplicación descontrolada.

La contaminación en Europa

Dentro de Europa, con los datos más recientes de 2017 de la Agencia Europea del Medio Ambiente, es Alemania el país que más emisiones de NOx (óxido de nitrógeno) genera. Este corresponde a la suma de óxido nítrico (NO) y dióxido de carbono (NO2), dos componentes contaminantes. El país germano tiene mucha contaminación por agricultura y producción energética, mientras que Francia va en cabeza por emisiones en vehículos por carretera. En cambio, el Reino Unido es el que más contaminación por transporte no terrestre produce.

Elaboración: Aquí Europa. Datos: Agencia Europea del medio ambiente

Como se puede observar, todavía se sigue generando este compuesto (NOx) en grandes cantidades. Eso sí, hay una tendencia descendente y cada año va siendo mucho menor la emisión de estos gases. Es comparable la suma total, por ejemplo, en Alemania, donde el transporte por carretera en 1990 sumaba 1.343 gigagramos (Gg), cuando en 2017 eran 402 Gg.

Desde hace años, la UE intenta remediar el problema de las emisiones. Precisamente con el Acuerdo de París firmado en 2016 se pretende reducir la cantidad de Gases de Efecto Invernadero emitidos. En noviembre de 2018, la Comisión presentó un documento con el objetivo de una Europa climáticamente neutra para 2050.

La estrategia pasa por invertir en soluciones tecnológicas “realistas”, la capacitación de los ciudadanos y tener precaución en campos como la política industrial, la financiación o la investigación. Según el Servicio del Cambio Climático de la UE, la temperatura global ascendió 1,1ºC desde la era preindustrial y en Europa casi 2ºC desde la segunda mitad del siglo XIX. Las temperaturas cada vez son más extremas: este verano varios puntos del norte de Europa alcanzaron cifras record, cómo fue el caso de París con 42ºC.