La Asociación Europea de Derechos Humanos (AEDH) ha denunciado la práctica del Gobierno belga que ha permitido a agentes de seguridad sudaneses identificar y deportar a solicitantes de asilo nacionales de ese país. Según la organización, esta práctica viola la Carta de Derechos Fundamentales de la UE. Además, pide al resto de gobiernos europeos terminar de forma urgente su colaboración con el régimen de Sudán.
“Transcurridos dos años vemos resultados tangibles y positivos de los esfuerzos europeos”. Así ha comenzado Dimitris Avramopoulos, comisario de Migración, su discurso para presentar el plan post 26 de septiembre de la Comisión para los refugiados: recomienda acoger a 50.000 personas, especialmente aquellas vulnerables procedentes del norte y Cuerno de África.
Lejos quedan las imágenes de miles de personas increpadas por policías húngaros al otro lado de la valla. De centenares encomendándose entre lágrimas al suelo griego. Dos años después del establecimiento de cuotas, han sido reubicadas en toda la UE 29.000 personas de 160.000. Dos años después del naufragio de Aylan Kurdi a la Unión le vuelven a salir los colores. Desde Bruselas lo llaman “éxito”. ¿Lo es?.
La UE ha acogido al 17,5% (27.695 de 160.000) de los refugiados que se comprometió hace dos años. España ha abierto las puertas a 1,7 personas al día, una cifra que le sitúa a la cola de incumplimiento junto a los países del Este. El eurodiputado Javi López, de los Socialistas, ha denunciado que “Rajoy ha dado la espalda a los refugiados” y a los españoles que demandan solidaridad.
La UE lo ha vuelto a decir: la gestión de la crisis migratoria ha sido un “éxito” teniendo en cuenta “las posibilidades y el contexto difícil”, ha asegurado Margaritis Schinas, portavoz de la Comisión Europea. A horas de que se cumpla el plazo designado para el reparto de refugiados, la media a lo largo de la UE es del 25% de acogidas. La de España 11,3%. Repasamos las condiciones iniciales y cómo han ido cambiando.
“Wir schaffen das (Lo conseguiremos)”. La enigmática frase con la que Angela Merkel comenzó su discurso en aras del “Welcome Refugees” le costó críticas de dentro y fuera de su partido. Desde 2015, la canciller alemana ha buscado el equilibrio en la gestión de una crisis migratoria que le podría poner piedras en el camino hacia su cuarta reelección. ¿Cómo le ha afectado?; ¿Qué ha cambiado?; ¿Ha repercutido en el auge de AfD?
133.640 migrantes han llegado a la UE por mar en lo que va de año, menos de la mitad de las personas que habían llegado durante el mismo periodo del año pasado. El porcentaje de personas que acoge Italia se ha rebajado al 75% con respecto a los meses anteriores, debido al incremento de las las llegadas durante las últimas semanas en las rutas oriental y occidental. En torno a 100 migrantes se encuentran desaparecidos en un naufragio registrado frente a la costa libia.
A Óscar Camps, fundador de la ONG Proactiva Open Arms, nada le sorprende ya de la Unión Europea. En entrevista a Aquí Europa cuenta su desencuentro con el barco ultraderechista C-Star, la inacción de Frontex o cómo los guardacostas libios se han convertido en los "matones" de la Unión. "¿Ha olvidado Europa cuando nosotros éramos los refugiados? - "Si esta Europa solicitase entrada a la UE no le dejaríamos entrar", zanja.
Septiembre es el mes más activo en lo que va de año en las costas de Grecia. Durante este mes en 2016 arribaron a las islas 1.068 personas. En lo que va de septiembre de este año ya son 2.234. Las condiciones meteorológicas y el contexto actual de la guerra en Siria explican, en parte, este aumento. No obstante, también abre la puerta a otra posibilidad: ¿Está Turquía cerrando los ojos ante la partida de refugiados?
España ha acogido al 13,7% de los refugiados que le asignó el Consejo Europeo hace dos años. A una semana de que expire el plazo designado por Bruselas, Oxfam Intermón ha denunciado al Gobierno español por el “alto incumplimiento” en la cuota de refugiados. La ONG pide a la Comisión que siga con Madrid “de forma urgente” los mismos pasos que con Polonia, Hungría y República Checa.
Dos horas más de lo previsto se ha alargado hoy el Consejo de Interior en Bruselas. La complejidad de los asuntos a tratar así lo requería: migración y terrorismo. El bloque converge en la idea de aumentar el intercambio de información –sobre la mesa está la idea de una Agencia de Inteligencia Europea. Dimitris Avramopoulos, comisario de Migración, ha señalado que hay que pasar de un modo de crisis a uno de acción.
Federica Mogherini, Alta Representante de Exteriores de la UE, ha expuesto hoy ante la Eurocámara el desarrollo de la política migratoria, celebrando el descenso de muertes en el mar y de llegadas pero recordando que aún queda mucho por hacer. Además, ha señalado que “los centros de detención en Libia deberían ser cerrados, pues no cumplen las condiciones mínimas de decencia”.
La Comisión Europea ha hecho oídos sordos al comunicado emitido el pasado viernes por Zeid Ra’ad Al Hussein, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, sobre la situación de los migrantes en Libia. El jordano lamenta las soluciones propuestas por la UE y los gobiernos europeos y critica especialmente la colaboración con la guardia costera libia y su condescendencia con prácticas inhumanas.
La respuesta de Viktor Orbán, primer ministro húngaro, a la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE que le obliga a acoger a refugiados no ha tardado en llegar. “Hungría no es un país de migración y no quiere serlo”, ha señalado en una carta dirigida a la Comisión Europea en la que ha calificado el fallo judicial de “violento e inaceptable”.
Joanne Liu, presidenta de Médicos sin Fronteras, ha realizado hoy públicamente un llamamiento a los Gobiernos europeos, a los que acusa de “alimentar el sufrimiento en Libia” y pide que dejen de devolver a los migrantes al país norteafricano. Las violaciones de derechos humanos en los centros de detención oficiales son “inhumanas”, denuncia la ONG. “Si aceptas la pérdida de vidas humanas, eres cómplice”, ha afirmado Jan Peter Stellema, asesor de operaciones.
El Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) ha dado con su sentencia de hoy un revés a Hungría y Eslovaquia, que pedían la anulación de las cuotas de refugiados. Luxemburgo ha sido claro: todos los países están obligados a cumplir sus compromisos y ayudar a Grecia e Italia, ya que las instituciones europeas están legitimadas para actuar de forma “efectiva y rápida” ante situaciones de emergencia.
Quedan 20 días para que expire el plazo de reubicación de 160.000 refugiados en los Estados miembros. Dimitris Avramopoulos, comisario de Migración, ha presentado el balance como exitoso, pero las cifras hablan solas: a día de hoy los Veintiocho han acogido a 27.695 personas. El comisario griego se escuda en “malentendidos” con los números, pero el cronómetro solo confirma el destino de un fracaso anunciado.
Al menos 400 personas de la minoría rohingya han muerto y más de 100.000 se han visto forzados a cruzar en los últimos días la frontera de Birmania a Bangladesh. Bruselas ha evitado pronunciarse sobre si considera esta persecución indiscriminada como limpieza étnica y ha pedido una reducción de la violencia. La birmana Nobel de la Paz Aung Suu Kyi también se ha ganado las críticas por su silencio ante la crisis.
Viktor Orbán, primer ministro húngaro, envió ayer una carta a la Comisión Europea pidiendo que pague la mitad de la alambrada que Budapest está levantando para frenar “el torrente de inmigrantes ilegales” durante el pico de la crisis de los refugiados. “No es una exageración decir que la seguridad de los ciudadanos europeos ha sido financiada por los contribuyentes húngaros”, asegura Orbán en la misiva en la que reclama 400 millones de euros.
David y Loumkoua han recorrido 2.700 kilómetros en bicicleta para promover la hospitalidad y la integración. Desde la frontera en Ceuta hasta el corazón de Europa en Bruselas han paseado su iniciativa para demostrar que “cuando nos encontramos desde el corazón, las personas somos iguales”. Una amistad la suya que quieren sirva de ejemplo de integración y acogida y contra los prejuicios.
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