Las opciones de Boris Johnson para consumar su Brexit se agotan. A la triple derrota de esta semana en Westminster se ha sumado otra. Los partidos de la oposición han llegado este viernes a un acuerdo para votar en contra o abstenerse en la moción que el Gobierno británico presentará el próximo lunes para convocar elecciones anticipadas el 15 de octubre. Cobra así fuerza la celebración de los comicios después del 31 de octubre con un Reino Unido todavía dentro de la UE.

El Gobierno de Boris Johnson recibe su primer revés en el proceso del Brexit. El Parlamento británico aprobó a última hora de la noche del martes una moción para quitar al Ejecutivo el control del proceso de salida y evitar una marcha salvaje. El líder conservador amenaza que antes de avalar este escenario, celebrará elecciones anticipadas el 15 de octubre.

Quedan 58 días para la fecha establecida en el calendario para el Día D, la salida del Reino Unido de la UE. Sin embargo, hasta entonces todo puede pasar. Londres puede celebrar elecciones anticipadas en poco más de un mes. Puede salir del bloque comunitario con un Brexit salvaje. O puede pedir otra prórroga a sus socios europeos. Estos son los días clave para cada escenario.

Un tribunal escocés ha rechazado este viernes la demanda de 70 diputados británicos para frenar de forma inmediata el cierre del Parlamento británico impulsado por Boris JOhnson, primer ministro británico. Eso sí, el juez Doherty llevará a cabo la audiencia completa el próximo martes, el mismo día que se retoma la actividad parlamentaria.

La decisión de Boris Johnson, primer ministro británico, de cerrar la Cámara de los Comunes durante cinco semanas ha levantado polvo fuera y dentro de la isla. El presidente del Parlamento Europeo es el único líder comunitario que ha reaccionado a la decisión del líder tory. Muchos eurodiputados han mostrado su oposición ante este "asalto" democrático.

Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea, ha regresado a su despacho del Berlaymont tras la intervención quirúrgica que lo ha mantenido durante las últimas semanas fuera de los focos. El luxemburgués mantendrá esta tarde su segunda conversación con Boris Johnson, primer ministro británico, cuando restan dos meses para que se consuma un Brexit que continúa igual de empantanado que siempre.

A Boris Johnson, primer ministro británico, le queda poco tiempo. El acuerdo del Brexit pactado por los Veintisiete y su antecesora, Theresa May, está a dos meses de llegar a la fecha final establecida por Bruselas: el 31 de octubre. Sin embargo, Johnson se muestra contrario a ese pacto y está iniciando una ronda de negociaciones con algunos líderes europeos para presentar su nueva propuesta. Esta semana el primer ministro mandaba una carta al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, exigiendo cambios en el documento.

Boris Johnson, nuevo primer ministro británico, ha hecho de la promesa de un Brexit el próximo 31 de octubre su ticket para llegar al cargo. Si hace falta que haya una salida de la UE sin acuerdo está dispuesto a ello, ha asegurado. El precio a pagar puede ser muy alto para Londres: la propia existencia del Reino Unido. Escocia vuelve a planear un referéndum de independencia y en Irlanda del Norte coge fuerza una posible consulta de unificación con la República de Irlanda. Ambas regiones votaron por permanecer en la UE en 2016.

Magid Magid es eurodiputado por Reino Unido y forma parte del grupo de Los Verdes. Llama la atención en los pasillos de las instituciones europeas con su gorra amarilla y sus camisetas negras con mensajes reivindicativos. En Aquí Europa hemos hablado con él sobre Brexit, el crecimiento de su grupo político en las elecciones, la nueva presidenta de la Comisión Europea y la falta de representación de las minorías en la Eurocámara.

No ha habido sorpresas. El euroescéptico Boris Johnson será el sustituto de Theresa May con las riendas del Partido Conservador y del Reino Unido. Es el segundo relevo en los tres años desde los que comenzó el embrollo del Brexit. El exalcalde de Londres tiene por delante una agenda muy complicada y coge el testigo de la líder tory con el partido dividido, la Cámara de los Comunes escéptica y el desafío de sacar al país de la UE.

Tres días lleva el Parlamento británico en marcha y tres cornadas de altura le ha asestado a Boris Johnson, primer ministro británico. El premier quería quitar el control del Brexit a la Cámara de los Comunes y ha sido esta la que se lo ha arrebatado. Con un Brexit sin acuerdo más difícil que hace unos días, el Reino Unido parece abocado a otras elecciones generales.

Muchas cosas se mueven estos días en Londres. Y aunque Bruselas reitera que en este lado del canal de La Mancha las cosas siguen igual, lo cierto es que aumenta el nerviosismo ante un cada vez más posible Brexit sin acuerdo. La Comisión Europea ha publicado este miércoles, en paralelo a la lucha entre el Parlamento británico y el Gobierno que lidera Boris Johnson, su sexta comunicación sobre medidas de contingencia para paliar los efectos de un divorcio a las malas.

Los rumores sobre una anticipación de elecciones en el Reino Unido crecen en una semana que se presenta clave en el caótico proceso que se ha convertido el Brexit. Boris Johnson, primer ministro, ha convocado una reunión de emergencias con su gabinete en medio de una rebelión tory y de la oposición para frenar una salida sin acuerdo. Entretanto, la UE mantiene su postura de que la pelota está en el tejado de la isla.

La decisión de Boris Johnson, primer ministro británico, de cerrar el Parlamento británico durante cinco semanas ha contado con el rechazo frontal de la oposición. Los ciudadanos de la isla también han mostrado su oposición a este movimiento que muchos han calificado de golpe de Estado. Más de 1.200.000 personas han firmado una petición que pide la marcha atrás y varias ciudades británicas han sido testigos de manifestaciones en contra de la medida.

El Gobierno británico ha pedido a la reina Isabel II que suspenda el Parlamento británico hasta mitad de octubre para evitar que la cámara bloquee la salida sin acuerdo.El último movimiento del Gobierno de Boris Johnson amenaza con abrir otra crisis política en el país y acerca todavía más la opción de un divorcio caótico con la UE. Bruselas, por su parte, ha guardado silencio ante lo que muchos han calificado de "golpe democrático".

La nueva ocurrencia de Boris Johnson, primer ministro británico, ha calentado más las bravas aguas de su relación con la Unión Europea. El líder tory ha deslizado la idea de no pagar o reducir la factura de salida acordada entre su antecesora y los Veintisiete. Bruselas advierte de que cumplir con los compromisos adoptados es condición sine qua non para comenzar cualquier acuerdo y relación futura.

La elección de Boris Johnson como primer ministro británico tuvo una reacción en los mercados con la caída de la libra. Ahora el Banco de Inglaterra ha advertido de que un no acuerdo podría provocar un "shock instantáneo" en su economía y que el Reino Unido podría entrar en recesión a pesar de que decida firmarse un documento entre Londres y Bruselas. Al mismo tiempo se retoman las conversaciones en Bruselas, con Londres amenazando con un divorcio desordenado si la UE no retira el 'backstop'.

Menos de 24 horas después de ser investido primer ministro británico, Boris Johnson ha llevado a cabo la purga que todos esperaban en su partido. En total, 18 de los 29 ministros de Theresa May ya han sido reemplazados del nuevo gabinete, al que se incorporan las figuras más euroescépticas de las filas tories: Sajid Javid, Dominic Raab, Priti Patel o Jacob Rees-Mogg son algunos de los nombres con los que Jonhson luchará para que el Reino Unido abandone la UE el próximo 31 de octubre.

El Grupo Directivo del Brexit (BSG con sus siglas en inglés) del Parlamento Europeo, un grupo de eurodiputados que coordinan la posición de la Eurocámara en las negociaciones, ha felicitado a Boris Johnson por su victoria que le corona como nuevo primer ministro británico a la vez que ha recordado la importancia de llegar a una solución beneficiosa para ambas partes. Aunque una línea roja permanece marcada: el Acuerdo de Salida no se toca.

Alan Duncan, alto miembro del Ministerio de Asuntos Exteriores británicos, ha anunciado este lunes su dimisión ante la inminente llegada de Boris Johnson al 10 de Downing Street. Varios miembros del Ejecutivo saliente que lidera Theresa May han confirmado que seguirán sus pasos antes de ver a Johnson con las riendas del partido y del país. Todas las encuestas dan al exalcalde de Londres la victoria frente a Jeremy Hunt.