El euro, la segunda moneda más utilizada en el mundo detrás del dólar estadounidense y el símbolo de integración e identidad en la Unión Europea, celebra este año su vigésimo aniversario en circulación. Durante estos 20 años se ha convertido en una moneda de reserva empleada en casi el 40% de los pagos internacionales a nivel global y ha fortalecido la Unión Económica Monetaria en momentos delicados como fue la crisis mundial de 2008.